-“¿Si rompes un espejo tendrás siete años de mala suerte?”-
Miro tu reflejo y me quedo
inerte, casi vacío sin poder hablarte. Junto mi palma sobre tu palma y sé que
sufres pero te veo feliz a mi lado. Llora y por cada llanto que derrames tras
el espejo te dará tanta felicidad para que inflames tu corazón. Yo veo tu vida
llena de luz mientras tu cuarto está lóbrego y apagado. Las telarañas cómo la
ausencia del movimiento y el paso de los años, yo soy el vigilante, el que
cuida tus días. El que cuando te miras al espejo para arreglarte y te sientes
bien contigo misma porque yo te yudo a transmitir esos pensamientos en ti, porque
quiero verte con bien. Yo doy brillo a tu mirada cuando por instantes ante tus
ojos perdidos y fijos logran materializar mi cuerpo porque yo soy el espacio
que llena tu vacío, testigo de todas sus locuras y desdenes de la vida de hacer
por mirarte en mí para llenarme de tu infortunio en cambio al mirarme en ti veo
sólo amor, logros, felicidad y dicha. Y si yo llegara a faltar en tu reflejo,
¿te volverías prospera y dichosa?, ¿Cómo al revés de mi perspectivo reflejo? Yo
no sé más a donde ir, si no esperar a que te peines y arregles para salir de
casa sin mí y te lloro. ¿Entonces por eso logras sonreír cuando estás lejos de
mí? Impaciente espero a que vuelvas y toques con tus manos el vidrio del
espejo, a eso que ves yo llamo aceptación cuando lloras por rechazos y alivio
cuando te miras enferma. No comprendo entonces el tiempo cuando una infante
miraba atrás de un parpadeo y creció mujer y ver de tu reflejo a otro ser igual
cómo tu que cargabas entre tus brazos y también empezó a cambiar de forma y
tamaño como un niño que ahora disfruto de sus risas y juegos pero me da miedo y
me estremece al mismo tiempo y me hace pensar que yo ya no te quería y que te
deje ir para que ya no volvieras sumida ante el reflejo de tu propia mirada. Y te
libere pero al mismo tiempo te protegí viendo y buscando tras laberinto de
tantos espejos donde en otros tiempos te acordarás de mí. Y si dices que no
tienes quien te quiera más cómo yo a ti, yo digo que sí, porque lo veo a él,
que se refleja a tu lado. Y si no hay amor, sé que si tendrás mucho amor por
dar quien te busque y necesite de tu comprensión otro reflejo que verán tus
otros yos en otros ojos. Y si mi niña yo sigo tras de la imagen que en tus ojos
quietos observan, más pronto obtuve valor, fuerza y coraje para salir de ese
oscuro plano para recuperar mi forma y estar en ti para todo momento y ya no
era necesario que te perdieras en la oscuridad del laberinto de nubes grisáceas,
porque quiero que manejes los mundos que
te des cuenta que puedes alterar la realidad y lo que no puede ser será y lo
que sucederá pronto se desvanecerá a través del tiempo oportuno. Pero me
pregunto, ¿Quién estará en tu futuro? Y si me preguntas más allá de lo que está
a los años lejanos percibo lo mucho que se ha de sufrir pero que del
sufrimiento vendrá alegría pero primero tendrás que aprender a sufrir para
después recuperar tu felicidad. Así trata la vida como el pensamiento así como
un sabio me lo dijo y rompió el espejo sagrado y dijo que tendrá siete años de
mala suerte en su vida, ya no volví a verle para preguntarle si en verdad había
tenido tan tanta mala suerte, ¿quién él para inventar tal superstición de tras
de los espejos que proviene de un cuento de hadas? La superstición me carcome
me hace pedazos y puedo ser aventado a un viejo bote de basura en un rincón. Pero
t pequeña mía, de los espejos rotos haz creado una nueva imagen y me ha
convertido en un florero con mis trozos rotos donde portaré lindas rosas y haré
que huelan con un exquisito aroma para que esa fragancia llegue hacia a ti en
forma de agradecimiento. Puedes cambiar tu vida en un momento y crear nuevas anécdotas
otros cuentos entre cada pensamiento. Y entonces verás, reflejado en ti el
sueño prometido en tu cuerpo mismo. Más feliz yo estaré, en penumbras y oscuro,
casi sin mirarte y verás pronto tus recuerdos escritos y yo volveré a ti
nuevamente entre cuentos y un recuerdo. Yo aquí estoy siempre, viendo cómo
pasan los años, siendo el vigilante que cuida de tus sueños mientras veo tu
cuerpo dormido y reflejado en el sillón ya cansada de leer. Siempre estás así,
y otros leerán lo que para unos es un cuento pero para mí significa una vida
alegre y recuerdos. Así que entre espejos me verás, pero tu darás forma a lo
que quieras ver y entonces la verdadera esencia de mi imagen conocerás en un
tiempo y lo reconocerás cuando otros ojos te miren. Y mientras pule, saca
brillo y vete reflejada en mí, que yo soy como tú, y a la vez nadie más te
conoce perfectamente como yo. Sacarás el brillo en tu mirar y me harán pensar
que otra vez te irá mal y lloras pero y si lloras, reirás y serás feliz. Más que
he sido contigo muy bondadoso y dejaré libre tu esencia pero no tendrás la mala
suerte como el que espera tener cuando el que uno rompe el espejo y estos verán
que cambia de forma y la idea del rechazo ya no será más. Mientras tus ojos se
reflejaran para admirar la vida y aunque sé que no esté presente en ella, se
que tu reflejo en mí, si lo estará.
FIN
Comentarios
Publicar un comentario